Libre de ti, ausente de mí ahora,
Has huido y te dejé partir
La noche negruzca envejece
Si no estás ya no hay luna.
Abrazo mi libertad,
Y me siento ajena en mis propios brazos,
Empaño mis ojos
Y mis labios rojos se sellan.
El tiempo no se detiene
Las luces se oscurecen
Y pienso en ti y en esta noche
Que no nos pertenece.
Dime viento si a su lado estas ahora,
Dime si su llanto también lo ahoga,
El viento se aleja y no estuve a su lado,
Y no estuvo él en mis besos, ni en mi mirada sombría.
La noche se acaba,
Sola y triste en agonía,
Y lamento esta soledad que me atormenta
Pues nació con su partida.
El don de otear, lo tengo en los ojos, lo llevo en las manos, lo impregno en papeles y lo comparto contigo en este espacio, un poco frío pero muy mío y muy tuyo también.
domingo, 3 de octubre de 2010
lunes, 14 de junio de 2010
Confesión
Bebe de mis labios
El puro amor que desbordo,
Es tuyo mi anhelo
Y el brillo de mis ojos.
Gran causante de alegrías,
Haz osado amarme
Y yo al escucharte,
He vuelto tuyos mis días.
Podrá envejecer hasta el mismo tiempo,
Pero jamás será nuestro amor senil,
Pues los suspiros me brotan del alma
Y las aves cantan cuando estas aquí.
¡OH!, cuanto más he de amarte sin decirlo
Si es muy pronto, a quién más que a ti, le importaría…
Tu aprobación no necesito para gritarlo
Si yo te siento en el mismo aire que me alivia.
El puro amor que desbordo,
Es tuyo mi anhelo
Y el brillo de mis ojos.
Gran causante de alegrías,
Haz osado amarme
Y yo al escucharte,
He vuelto tuyos mis días.
Podrá envejecer hasta el mismo tiempo,
Pero jamás será nuestro amor senil,
Pues los suspiros me brotan del alma
Y las aves cantan cuando estas aquí.
¡OH!, cuanto más he de amarte sin decirlo
Si es muy pronto, a quién más que a ti, le importaría…
Tu aprobación no necesito para gritarlo
Si yo te siento en el mismo aire que me alivia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)