Libre de ti, ausente de mí ahora,
Has huido y te dejé partir
La noche negruzca envejece
Si no estás ya no hay luna.
Abrazo mi libertad,
Y me siento ajena en mis propios brazos,
Empaño mis ojos
Y mis labios rojos se sellan.
El tiempo no se detiene
Las luces se oscurecen
Y pienso en ti y en esta noche
Que no nos pertenece.
Dime viento si a su lado estas ahora,
Dime si su llanto también lo ahoga,
El viento se aleja y no estuve a su lado,
Y no estuvo él en mis besos, ni en mi mirada sombría.
La noche se acaba,
Sola y triste en agonía,
Y lamento esta soledad que me atormenta
Pues nació con su partida.
3 comentarios:
me gusta tu estilo, se nota que dejas fluir tus sentimientos profundamente y los gozas en plenitud, eso es bueno, en qué te inspiras? y sobre todo en q te has inspirado para escribir ese último que según la publicación lo has subido ayer??
Gracias Israel... así es lo subí ayer pero lo escribí hace mucho, así como otros escritos, sabes... la inspiración no sólo nace, también se trabaja y se provoca, bueno... esta es mi versión. Cuídate mucho!
Yo me fuí pero en realidad es como si ella se hubiese ido. Escrito muchos años atrás, este poema ha sido premonitorio. Yo me he quedado en esa noche, repitiéndola una y otra vez como si se tratase de un bucle temporal interminable, una película de la que no encuentro el final. Es como si mi cuerpo quisiera entrar en otra realidad cuántica que nunca será, que nunca viviré, o es que ya la he vivido. La verdad es que ella se fué pero yo me quedé allí, esperando... La extraño...
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